Cuando decidimos dedicarnos a la vitivinicultura, en 2005, nuestra realidad como familia cambió para siempre. ¿Por qué? Porque esta actividad constituye una forma de vida que da satisfacciones, pero también tiene sus sinsabores: el trabajo de todo un año puede verse arruinado por una caída de granizo.

Otro factor que debemos contemplar es la posibilidad de que una helada impida que veamos los frutos de la vid, y que todo el cuidado y la dedicación hayan sido en vano.

Ante estas adversidades, si hoy nos preguntaran cuál es la filosofía del vitivinicultor, sin duda responderíamos: “No darnos jamás por vencidos, aun vencidos”. Y agregaríamos que la pasión por la elaboración de nuestra bebida es la que nos impulsa a seguir adelante.

 

La madre tierra nos regala este maravilloso fruto con el que hacemos el “elixir de los dioses”. Pero para deidades que no son Adonis, ni Dionisio, ni seres angelados: son personas de carne y hueso que disfrutan en su estadía terrenal de las bondades del vino… ¡como tiene que ser!

Honrar la vid y sus frutos también es una forma de agradecimiento a la naturaleza que generosamente nos los provee.

Un “me gusta tu vino” o un “te felicito” constituyen la retribución más esperada por los vitivinicultores; nos hace sentir que todo el esfuerzo valió la pena.

Amamos el vino y amamos elaborarlo. Es sinónimo de disfrute, de compañía, de los buenos momentos, las buenas charlas, los amigos. Es el medio y el generador de recuerdos inolvidables. Por eso, decimos:

El vino, ni solo ni a solas”.

Hasta el 2005 Daniel era un comerciante que simplemente disfrutaba del vino. Sin embargo, su vida dio un giro radical ese año, y hoy dirige los destinos de la Bodega. En él se encarnan la destreza y la humildad que le permiten cumplir, además de su rol jerárquico, tareas menores aunque indispensables para el funcionamiento del establecimiento.
Daniel E. Alvarez
El Jefe
Andrea es nuestra enóloga, responsable de la elaboración de nuestros productos. El mundo del vino fue parte de su infancia y signó su profesión. Esa niña que disfrutaba al observar cómo su abuelo lo preparaba, hoy es quien ve transformar el jugo de la uva en su propia creación.
Andrea Di Silvestre
La Enóloga
Daniel Jr. es amante del vino, como no podía ser de otra manera. La función versátil que cumple en la Bodega le permite interiorizarse de todo los procesos que llevan a la producción de nuestra bebida nacional, tan emblemática de la provincia de Mendoza.
Daniel Alvarez Jr.
El Che Pibe
Felipe es “el heredero” de la familia, y ya a su temprana edad es protagonista del proceso de la transformación de la uva en vino. Como buen hijo de vitivinicultores, acompaña y participa de todas las etapas: desde la molienda, los cortes y la poda, hasta la elaboración. Crecer entre vides y barricas deja en Fulano una huella indeleble para el resto de su vida. La cultura del trabajo y el esfuerzo, y la mística del mundo del vino, imprimirán en Fulano todo lo que convierte a una persona en ferviente amante de la vitivinicultura.
Felipe D. Alvarez
El Heredero

El vino es dsifrute de los buenos momentos, las buenas charlas, los amigos y que el vino sea el medio de generar excelentes momentos.

El vino, ni solo ni a Solas!!

Nuestros vinos han participado de las más importantes exposiciones de la industria en el país. Brillaron en eventos que tuvieron lugar en Tandil, La Plata, Puerto Madryn, Misiones y Córdoba, entre otras. 
Junto a otras empresas destacadas de la provincia, Uva Negra Wine formó parte de la comitiva que viajó en 2011 en misión comercial a Shanghái (China), Hong Kong y Tokio (Japón). La experiencia permitió afianzar lazos comerciales y mostrar nuestros productos al mercado asiático.

RepresentanDO MENDOZA

El vino es la única obra de arte que se puede beber

Nuestros Vinos

Algunas combinaciones que pueden hacer tu día mejor

Premium Malbec y Cabernet Sauvignon surgen de verte, de escucharte y de entender que necesitás una línea diseñada pensando en vos. Sabemos que querés disfrutar de un vino suave y ligero, sin complicaciones. Y lo más importante: que sea perfecto para acompañarte en una comida, en una charla, en un encuentro mágico complicaciones y que este listo para acompañarte, en una comida, en una charla, en algo más!!

Nuestra línea Reserva está compuesta por vinos que han recibido el tratamiento especial y durante el tiempo necesario, para poder estar de etiqueta. ¿El motivo? Probarse ante los más exigentes jurados: los paladares de nuestros clientes.




Por su frescura y versatilidad son ideales para compartir momentos de disfrute y relajación. Un espumante no es un solo vino, es la posibilidad de transformar un vino en una gama de sabores que tiene como único límite tu creatividad.




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